Por Judith Astelarra
El
sufragismo tuvo vocación internacional y creó redes desde los países donde tuvo
más fuerza, los Estados Unidos y el norte de Europa, hacia otros pueblos del
mundo. América Latina fue una de las regiones en que el feminismo decimonónico
y las organizaciones de mujeres se incorporaron a éste movimiento
internacional, aunque un poco más tarde en el tiempo. Los sesgos androcéntricos
de las Ciencias Sociales, incluída la Historia, hizo que el movimiento sufragista
latinoamericano no fuera debidamente conocido y estudiado, a pesar de que
existía documentación que requería ser sacada a la luz.
Cuba
era uno de los países en que esta revisión historiográfica estaba pendiente. Es
por eso que este libro de Julio César Gonzáles Pagés ha sido recibido con tanto
entusiasmo por las y los especialistas del tema: ha sido el primer aporte en
esta dirección. Pero su valor no reside sólo en su condición de primerizo; el exhaustivo y riguroso trabajo de
investigación realizado permite disponer de un excelente material tanto para
los interesados en la Historia de Cuba como para los estudios comparativos
internacionales.
Sin
duda, muchas personas darán la
bienvenida a esta nueva edición del libro.
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